Alegría, fluido de baja densidad

16 de junio de 2008

La alegría fluye a través de nosotros, gira a nuestro alrededor. Su movimiento es errático, caótico por momentos, difícil de aprehender pero ilusionante como idea. La inhalas y un remanso de paz se instala en tu yo, un perímetro de bondad te rodea y en tu rostro permanece una sonrisa indeleble.

La alegría, como todo estado emocional, es algo momentáneo, no perdurable por mucho tiempo. No obstante, se dan situaciones puntuales en donde te golpea tan fuerte, que te imbuyes en una locura pasajera, un estado de felicidad irracional donde ninguna palabra alcanza lo que tus poros exhalan.

No sería capaz de afirmar, ni negar, el haberme sumido en tal trance. Sin embargo, sería ruin no admitir el deseo de volver a sentir una brisa fresca golpeando mi tez desnuda al amparo de tus besos. Tan solo la idea, me hace abandonar el lugar físico en el que me hallo, una esfera aislada del mundo me contiene, soy imperecedero.

Al final, todo se acaba, tu esfera no era más que un débil corpúsculo formado por unas vanas ilusiones. Vuelves a tu mierda, pero qué bien sabe a veces.

4 comentarios:

Alex dijo...

Si escribes un libro yo te lo compro.

Delacroix dijo...

es una puta mierda

Anónimo dijo...

No te meteas con mi AMIGO MCN y su cara de cebolla

MCN dijo...

Bueno... lo escribí hace ya dos meses y medio, si no lo publiqué antes es porque no me gustaba demasiado, así que entiendo la reacción.